miércoles, 2 de enero de 2013

Historias cortas 4.

Joder. Qué frío hace. Y ese estúpido pájaro posado en el árbol no deja de mirarme. ¡Lárgate y déjame en paz! No sé qué quieres, pero no vas a conseguir nada de mí. 
Y ahí sigue. Mirándome. 
Saco el paquete de tabaco del bolsillo de mi chaqueta de cuero y lo enciendo despacio.
Cambio mi postura, me inclino aún más en el banco y apoyo los brazos sobre las piernas mientras hago un vano intento de peinarme con las yemas de los dedos. 
Una calada tras otra el humo penetra despacio en mis pulmones dejándome más tranquilo.
Vuelvo a mirarle, y ahí sigue.. Mirándome fijamente. Tiro la colilla y me saco y enciendo otro cigarro. Juraría que ese puto cuervo era una estatua de no ser porque acaba de girar la cabeza.
Parece que me mira diciendo "¿Otro?". ¡A ti qué más te da! ¡No es tu vida! 
Me parece que estoy demasiado nervioso, tengo que relajarme... Mis pies tocan una batería invisible casi sin hacer ruido.
Música.. Eso me relajará.
Me pongo los cascos y dejo que salte lo que quiera en el aleatorio del Ipod. Bien, system of a down.. Eso me relajará.
Me recuesto sobre el banco y me dejo llevar por la música. Abro los ojos y ahí está.
Dos ojos negros como la noche, un pelo negro azabache brillando bajo la luz tenue del atardecer. Qué sonrisa.
Me está mirando, no dice nada, sólo sonríe y me mira escondida en unas frondosas pestañas y unos traviesos mechones de pelo que los cubren.
No sé quién es, pero tiene algo que me atrae a ella contra mi voluntad.
Estoy de pie.. ¿Cuándo me he Levantado? Mierda, parezco una marioneta guiada por unas cuerdas invisibles hacia ella.. No puedo resistirme, esos ojos negros me están reclamando, me piden que vaya detrás de ella. 
Me quito la música y tiro lo que me queda de cigarro, todo sin dejar de mirarla a los ojos.. 
Me coge de las dos manos y por fin rompe el vínculo de nuestros ojos para llevarme a algún sitio. ¿Por qué estaba yo aquí? ¿Por qué tan nervioso? entonces levemente, como si tuviese una pantalla de humo delante, me acuerdo de todo. Demasiado deprisa.. Médico. Habitación blanca. Pete.. Accidente de coche. Ellos ya no están. ¿Cómo se lo digo a sus madres? Joder. Y ella me sigue llevando, me aleja de todo. Cada vez la luz de la farola se va apagando.. Todo se vuelve oscuro. Ya no veo nada.. Sólo tengo en mente unos ojos negros mirándome y un cuervo vigilándome de cerca.